La mayoría de los amantes de los loros conocen la rosella común y la rosella roja de Australia, pero ¿has oído hablar también del perico de Tasmania (Platycercus caledonicus)? Este perico tiene un color verde precioso y puede ser una mascota estupenda.
Si estás pensando en adquirir un perico de Tasmania o simplemente quieres saber más, ¡sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber sobre este lorito!
Nombres (común, científico) | Perico de Tasmania, rosella verde, rosella de Tasmania, Platycercus caledonicus |
Hábitat natural | Tasmania |
Tamaño | Hasta 37 cm y 150 gramos |
Duración de vida | Hasta 25 años |
Nível de ruido | Medio |
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Aspecto del perico de Tasmania
En cuanto a las rosellas (pericos de cola ancha) del género Platycercus, el perico de Tasmania no se encuentra entre las especies más espectaculares. Quizá por eso es un poco menos popular en avicultura que muchos de sus primos. Aun así, ¡es un loro muy bonito!
El perico de Tasmania tiene un color verde-amarillenta en el vientre y la parte inferior. Las plumas de la espalda son en su mayoría de color negro pardo, con bordes azules y un toque de verde. Hay una mancha roja sobre el pico y las mejillas son de un azul llamativo.
Este perico es el más corpulento de su género, ya que los machos llegan a pesar hasta 150 gramos. Su longitud máxima desde el pico hasta la cola es de hasta 37 cm.
¿Lo sabías? Como ocurre con otros muchos loros, las rosellas verdes jóvenes tienen un aspecto diferente al de los adultos. Su espalda es verde en lugar de negro azulado. Sólo cuando alcanzan los 2 años de edad cambian completamente a su coloración adulta.
Hábitat natural del perico de Tasmania
Denominación
El perico de Tasmania fue visto por primera vez por alguién de fuera de la isla en una de las expediciones de James Cook, durante la cual se recogieron muchos ejemplares de aves.
Pasó un tiempo antes de que se pudiera describir a la especie. Los ejemplares estaban a menudo mal etiquetados y se deshacían; el ornitólogo que los recogió murió antes de que se pudiera progresar mucho.
El espécimen del perico de Tasmania acabó denominándose Psittacus caledonicus, o loro de Caledonia, como resultado de la confusión. Más tarde se le cambió el nombre por el de Platycercus, pero el incorrecto «caledonicus» se mantuvo.
Hábitat
En realidad, el perico de Tasmania se encuentra de forma natural en Tasmania (no en Nueva Caledonia). También es común en algunas de las islas del estrecho de Bass, el mar que separa Australia de Tasmania. Esto incluye la Isla King, la Isla Flinders y algunos otros grupos de pequeñas islas dispersas.
Dentro de su área de distribución natural, este loro no es demasiado selectivo en cuanto al tipo de hábitat. Mientras haya algunos árboles o matorrales disponibles, todo vale: selva tropical, bosque de montaña, huertos, jardines, parques y más.
La especie puede encontrarse casi al nivel del mar o hasta los 1500 m de altura. Suele viajar en pequeños grupos y busca comida sobre todo en los árboles, aunque también baja al suelo de vez en cuando.
Anida en árboles huecos, lo que es habitual en los loros. Los eucaliptos son sus árboles preferidos.
¿Lo sabías? El perico de Tasmania está catalogado como de «Preocupación Menor» por la Lista Roja de la UICN, y es una de las aves más comunes de las islas. Sin embargo, se observa que el tamaño de su población está disminuyendo. Las razones más probables son la pérdida de hábitat y las especies invasoras que causan problemas.
IUCN Red List
Dieta del perico de Tasmania
Dieta silvestre
En la naturaleza, el perico de Tasmania se alimenta de las semillas de una amplia gama de plantas diferentes. Les gustan las semillas de varias especies de hierbas y arbustos, pero también de espino, pino, árbol del té y muchas más.
Aparte de las semillas, este loro come flores, brotes de hojas y algún que otro insecto. Incluso se le consideraba una plaga agrícola que solía causar problemas a los primeros colonos de Tasmania.
Por ejemplo, el famoso ornitólogo John Gould visitó la isla en algún momento del siglo XIX y anotó (traducido):
«(…) en una ocasión vi centenares congregados en la puerta de un granero entre la paja de un maíz recién trillado, precisamente a la manera de las palomas y los gorriones en Inglaterra».
Por cierto: también señaló que se comía a menudo los pericos de Tasmania y consideraba que su sabor era «excelente».
Dieta doméstica
Si quieres tener un perico verde como mascota, es importante que prestes cierta atención a la dieta de tu pájaro. Por alguna razón, estos loros parecen ser más propensos a la obesidad que otros de su género!
La clásica mezcla de semillas secas que asociamos con los loros definitivamente no servirá para tu perico de Tasmania. Las semillas de girasol especialmente tienen un contenido demasiado elevado de grasa, lo que puede provocar problemas como hígado graso.
En su lugar, ofrece alimentos con menos calorías y más densos en nutrientes como:
- Un pienso de alta calidad para loros como alimento básico
- Muchas verduras frescas
- Algo de frutas frescas
- Semillas de vez en cuando, preferiblemente germinadas
- Extras como arroz integral cocido, pasta integral, quinoa
Los loros de este tipo no necesitan muchas proteínas adicionales en su dieta, pero puedes ofrecerles un poco de huevo cocido como premio de vez en cuando.
Asegúrate de proporcionar siempre a tu perico de Tasmania acceso a agua fresca. Una fuente de calcio como un jibión también es una buena idea.
Vivienda del perico de Tasmania
¿Jaula o pajarera?
Como los pericos de Tasmania son aparentemente tan propensos a volverse obesos, suele recomendarse mantenerlos en una pajarera grande de al menos unos 5 metros de longitud.
Dicho esto, no hay razón para que no puedas tener estos loros en casa. Sólo tendrías que elegir una jaula grande y dar a tu pájaro la posibilidad de volar. Una jaula larga es más adecuada que una alta.
Si mantienes a tu(s) perico(s) en una pajarera, es recomendable que te lo pienses dos veces antes de combinarlo(s) con otros loros. Son conocidor por ser algo agresivos y no se suelen llevar bien con sus vecinos. Es mejor mantenerlos sólo con su propia especie.
Decoración de la jaula
Si has elegido una pajarera para tu(s) perico(s) de Tasmania, recuerda que debe ofrecer sombra y contener muchas perchas y juguetes. También se apreciará algunos un baño, y siempre es bueno incluir ramas frescas. Asegúrate también de que no puedan entrar depredadores, como las serpientes.
Para una jaula de interior, asegúrate de equilibrar la decoración y el espacio. Tu pájaro necesitará perchas naturales y muchos juguetes divertidos, pero también es importante que pueda poder desplegar sus alas. Deja una buena zona abierta en el centro.
Enriquecimiento para perico de Tasmania
Social
Como ya se ha mencionado, los pericos de Tasmania silvestres suelen vivir en pequeños grupos. Al igual que otras especies de loros, son muy sociables. Un perico privado de compañía puede deprimirse y volverse ruidoso o incluso agresivo.
Si quieres tener a tu loro solo, tendrás que estar en casa la mayor parte del día para hacerle compañía. Sácalo de su jaula para que pase el rato, cántale, o pasa algo de tiempo enseñándole trucos.
Si tienes un trabajo con horario normal, es mejor conseguirle un compañero a tu perico para que no se aburra.
Otras actividades
Algunas fuentes describen a los pericos de Tasmania como algo apáticos. Tendrás que esforzarte para que tu pájaro se mueva lo suficiente y no tenga sobrepeso. También es importante evitar el aburrimiento y seguir estimulando siempre esos pequeños cerebros inteligentes.
Dejar que el loro salga al menos unas horas al día de su jaula es el factor más importante. Coloca un parque de juegos en la parte superior de la jaula para estimular el juego, y deja que tu pájaro explore libremente pero de forma segura su entorno.
Temperamento del perico de Tasmania
Aunque las rosellas no son los pájaros más mimosos, pueden ser unas fantásticas mascotas. Si el tuyo está socializado, es más que probable que le encante pasar tiempo juntos para jugar o incluso para simplemente sentarse contigo mientras ves una película.
Como ya se ha mencionado, los pericos de Tasmania se consideran agresivos con otras especies de loros. Con respecto a las personas no hay ningún problema, pero son propensos a masticar todo tipo de objetos, lo que es normal para los loros.
¿Son ruidosos los pericos de Tasmania?
La llamada de la bandada de la rosella verde se considera un poco inusual para los loros. Si tienes curiosidad, puedes escucharla en Xeno-Canto!
Generalmente, no se considera una especie excesivamente ruidosa, pero eso tampoco significa que sean silenciosos. Todos los loros hacen bastante ruido.
¿Pueden hablar?
Como la mayoría de los loros, estos pericos pueden aprender algunos silbidos y frases sencillas. Sin embargo, sus voces no son muy claras.
Seguridad y urgencias
Los loros son excelentes en meterse en problemas, y el perico de Tasmania no es una excepción. Debes tener siempre a mano el número de un veterinario de aves en caso de urgencias.
Otras buenas prácticas de seguridad para los loros que se tienen como mascotas en casa son:
- Ser consciente de las toxinas. Los loros tienen pulmones sensibles y cosas como el humo de los cigarrillos, los vapores de las sartenes y los cosméticos perfumados pueden dañarlos o incluso matarlos. Investiga lo que debes evitar.
- Proporcionar un entorno seguro para los loros. Cualquier habitación a la que tenga acceso tu perico debe estar libre de plantas tóxicas, ventanas abiertas u otros animales domésticos como gatos y perros.
- Conocer el aspecto de un pájaro enfermo. Los loros son muy buenos ocultando su dolor, pero hay algunas señales. Los síntomas incluyen hinchazón, letargo, flujo nasal y más.
- Tener a mano un botiquín de primeros auxilios. Puedes incluir cosas como pequeñas vendas, coagulante, pinzas y más.
Por último, no te olvides de llevar al veterinario cualquier ave nueva que añadas a tu familia para una revisión inicial. Después, puedes acudir a las revisiones anuales.
Si tienes más preguntas sobre el perico de Tasmania o si quieres compartir tus propias experiencias con este pequeño loro, no dudes en dejar un comentario abajo.
Fuentes
Mathews, G. M. (1925). The birds of Australia (Vol. 12). Witherby & Company.